1 nov 2010

Su trabajo creativo comenzó en su país, Argentina. Allá se desempeñó como redactor en varias agencias hasta que, en 1998, llegó a nuestro país donde inició su carrera en el mismo rubro. Su desempeño pudo calificarse en varias agencias nacionales de publicidad, como Mass, Nasta y otros, hasta que decidió abrir su propio negocio junto con Gonzalo Murcia. Así nace la agencia Galeano-Murcia. Su ascenso fue dándose paulatinamente, pero con seguridad. Al tiempo que abría las puertas de su publicitaria, también realizaba asesoría, comunicación y planificación, y enseñaba en varias aulas de distintas universidades. Todas estas experiencias fueron nutriendo su trayectoria y, como era de esperarse, incursionó en los medios audiovisuales. “Contraoferta” fue su primer corto, comenzando así a trazarse un nuevo horizonte y una etapa de crecimientos. No tardó en llegar a la dirección de cine publicitario. “En la publicidad siempre me vi influenciado por esta rama”, confiesa a nuestra revista.

Ya en sus años universitarios, la tentación más fuerte era el estudio de cine, pero optó por la publicidad, su segundo amor, como él mismo afirma y, además, porque es un medio exigente e inevitablemente se aprende mucho. “Comencé con comerciales de bajo presupuesto, rozando siempre en un lenguaje de comerciales, diferente a los demás lenguajes audiovisuales pero sumamente ambicioso, ya que me movía en la mayoría de los géneros”.

Entre sus obras se encuentran el corto “La última carta”, campañas audiovisuales para el Sudameris, Seneté, la alabada campaña de donación de sangre expuesta el año pasado (ganadora de varios premios nacionales), los videoclips de Tania Simbrón y Gaia, además de los trabajos que están en proceso de preproducción: el videoclip de Charlie Nutela, dos comerciales para Seneté con los Kchiporros, y la adaptación de un cuento de Helio Vera, “Póra”, que se estrenará a principios de noviembre. “Voy por buen camino y eso me impulsa a ir creando, innovando. Claro que también cuento con la ayuda de quienes me solicitan, así como del equipo con el que trabajo, entre ellos Martín Crespo, en la dirección de fotografía; Antonio Mancuello, en lo que hace a luces. Tengo, además, equipos de productores free lance que van armando la escenografía, los vestuarios, la logística y cada vez están más profesionalizados”. 

Asegura que le importa mucho el cliente; y los resultados que el cliente obtenga, esa es su mejor garantía para seguir trabajando. Tiene un celo muy especial en la calidad de imagen. Le importan mucho los valores de producción de manera de entregar al cliente una imagen totalmente estética que funcione en términos de comunicación. “Creo que el éxito radica en escuchar lo que quiere y satisfacer sus demandas”.

Los trabajos que mayor satisfacción le dieron fueron la campaña de bien público para la Fundación Rocío Cabriza, sobre donación de sangre, y el video de Tania Simbrón al igual que el de los Kchiporros. Con este último grupo musical se le abre la oportunidad de que su trabajo sea conocido y reconocido en otro país. “Vamos a entrar al mercado mexicano, pero no puedo adelantar nada. Los integrantes de Kchiporros son muy cautelosos; les gusta sorprender y hay que respetar, de eso también se trata nuestra filosofía y éxito, en lograr el objetivo y luego difundirlo”.

Los proyectos para el 2011 no faltan. “Hay dos ficciones para la televisión, que están en proceso de rodaje, acá en Asunción. Un programa de drama unitario, que tiene mucho trabajo actoral, de dirección y de fotografía. Título: “Tiempo muerto”. Otro es de ciencia ficción, un proyecto más pequeño, muy chistoso. El mes para darlos a conocer es marzo”.   

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