El director de la Autoridad de los Estándares de Publicidad, Guy Parker, indicó a la BBC que las imágenes que mostraba la publicidad eran "exageradas y violaban el código ético". La marca admitió que las fotografías habían sido retocadas, pero que no por eso eran engañosos. El anuncio de la modelo Christy Turlington también será retirado.
En la publicidad de Turlington, que promociona una crema anti envejecimiento, al menos, se le aclaró la piel, se oscurecieron las cejas, se contornearon los labios y se redujeron las sombras alrededor de los ojos. En la de Roberts, publicidad de una base de maquillaje, se le añadió brillo a la piel.
Para la representante liberal que realizó la primera denuncia, Jo Swinson, algunos retoques pueden ser aceptados, pero los anuncios de L'Oréal mostraban imágenes "absolutamente falsas". Swinson señaló que eso podría contribuir a generar desórdenes alimenticios y corporales.
"La mitad de las mujeres de entre 16 y 21 años considerarían hacerse una cirugía estética, mientras que los trastornos alimentarios aumentaron el doble en los últimos 15 años. Los retoques excesivos contribuyen con ese problema", advirtió la legisladora británica.
En verdad, las publicidades de L'Oréal fueron prohibidos porque los anunciantes no pudieron demostrar cuántas modificaciones en total se habían hecho sobre las imágenes, según comunicó Parker.
"Tienen que ser capaces de proporcionar el material necesario para que nosotros podamos evaluar si se trata de una publicidad engañosa o no. Como L'Oréal no lo hizo, aplicamos la sanción", sostuvo el directivo.
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